Por esto, te compartimos algunas ideas o consejos para que elimines los distractores y seas tan productivo como lo llegarías a ser en una oficina:
Adecua un espacio de trabajo apropiado, lejos del televisor, la cocina y sobretodo de tu cama, asegúrate que sea un espacio cómodo, iluminado y donde te puedas alejar de todo lo que pueda estar sucediendo en casa.
Levántate temprano, arréglate tal como si fueras a ir a la oficina, por nada del mundo trabajes en pijama, esto te puede producir pereza y pocas ganas de trabajar.
Fija un horario de trabajo con sus respectivos tiempos de descanso y por supuesto cambia de ambiente para ingerir tus alimentos, no lo hagas en tu espacio de trabajo.
Has ejercicio antes de empezar a trabajar, esto en caso de que te levantes muy aperezado, ya que esto activa tu organismo y te puede recargar de energía; también puedes dejar el ejercicio para el final de tu jornada ya que te ayudará a despejar la mente de todos los proyectos y tareas que quedaron pendientes para el otro día.
Anota las actividades que tienes pendientes para realizar en el día, listar las tareas que debes desarrollar ayuda a que te mantengas enfocado y el cumplimiento de dichas tareas se convierten en pequeñas victoria que te mantienen motivado.
Determina los tiempos que ocuparás en cada tarea, hay momentos en los que sin darnos cuenta alargamos las tareas más de lo necesario, en importante fijar tiempos de ejecución para ser más productivos.
Evita las redes sociales o perderte navegando en la red leyendo cosas que te distraen y te hacen perder el foco de la tarea que estas realizando, las redes sociales pueden ser tan entretenidas que pierdes la noción del tiempo.
Identifica tus picos de productividad y de acuerdo a estos organiza las actividades que vas a hacer en el día, en los momentos más productivos te puedes dedicar a los proyectos difíciles y que requieren de tu completa concentración, en los momentos menos productivos has tareas más simples o incluso que sean repetitivas.
La socialización déjala para cuando te sientas motivado, es decir, si debes realizar tares que implique relacionarse con otros por ejemplo llamadas telefónicas, dedícate a estas cuando estés motivado y bien despierto, en ocasiones te encuentras en tiempos que no deseas hablar con nadie, aprovecha estos momentos para realizar tareas que puedes hacer solo.
Una de las reglas de la productividad es que cuanto más ocupado estás, más productivo eres. Al tener muchas cosas por hacer, el cerebro no permite que te distraigas fácilmente ya que estas concentrado en cumplir con todas tus obligaciones o metas.
Mantente conectado, es importante no dejar de lado la comunicación con tus compañeros de trabajo, aunque trabajar desde casa puede eliminar los distractores que algunos compañeros pueden generar, la soledad de tu casa puede ser desmotivante así que aprovecha la tecnología y mantente conectado.
Escucha música que sea de tu agrado y te permita concentrarte en tus tareas mientras disfrutas un buen rato.
Infórmales a las personas con las que compartes en casa que te encuentras trabajando y de esta manera sabrán que estas ocupado y necesitas concentrarte, reduciendo las interrupciones.
Duerme bien y aliméntate sanamente, el descanso y la alimentación son factores importantes en la productividad, procura dormir 8 horas diarias y planifica tus comidas para que sean provechosas y nutritivas.
Vive la vida y disfruta al máximo lo que haces diariamente.
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